Este clásico de fin de siglo cruzó las décadas venideras sin arrugarse ni envejecer, sino todo lo contrario: las capas de sentidos y significados siguen aflorando a raudales, dándole un aspecto tal vez no tan cómico pero más sorprendente y con una mirada más amplia. La semblanza de Los Ángeles, la sexualidad del Dude, la diagonal omnipresencia de la guerra y del trauma, el bowling como sublimación; todo esto aparece tras el disparatado noir y su grotesco bestiario, como un agridulce regusto tras las carcajadas. De esto y más hablamos en el podcast.