El conocimiento védico es infalible debido a que desciende directamente del Señor Supremo al corazón de Brahmā, y como Brahmājī es el ser viviente más perfecto que existe, él siempre está en lo correcto al pie de la letra en virtud de su contacto íntimo con la Personalidad de Dios a través de la relación del trascendental servicio amoroso.