Jehová Dios no colocó al hombre en un desierto duro y hostil.  Dios preparó para él un refugio especial en un jardín bien plantado y regado.  Los detalles de la provisión de Dios: 1) árboles frutales en el área del Edén, y 5) el nombre del jardín mismo – todas estas muestran el interés de Dios por nuestro bienestar físico y su provisión para nuestras necesidades.  Dios también enseño al hombre a trabajar y a ser su compañero e el desarrollo de los recursos naturales de la tierra. Dios no quiso que el hombre fuera aburrido y sin propósito.