Un long dimanche de fiançailles es el título en francés de esta película de cuestionada nacionalidad por el importante financiamiento estadounidense que recibió y que le permitió ser lo que es: una vertiginosa superproducción con un amplio y a la vez selecto reparto, francés e internacional. Drama detectivesco sobre un fondo bélico, usa los manierismos de Amélie para darle colores y señas a una historia completamente distinta, y destinada en parte a aclarar el torpe malentendido generado por el éxito de su predecesora y el ascenso electoral del Frente Nacional.