Aunque [Kṛṣṇa] es el Señor y siempre está dispuesto a aliviar la aflicción de los que sufren, se abstuvo de matar a los Kurus, a pesar de que cometieron toda clase de pecados, y a pesar de que veía a otros reyes agitando constantemente la Tierra con sus fuertes movimientos militares, llevados a cabo bajo los dictados de tres clases de orgullo falso.