Bisnieta, hija, hermana y pareja de médicos alópatas/tradicionales. La medicina alópata u occidental siempre fue la opción “lógica” para acceder a la salud con la cual no contaba. Los medicamentos tradicionales reparaban temporalmente mis dolencias gástricas e intestinales presentes desde los 16 años pero yo no sanaba en realidad y cada recaída era peor que la anterior pues sufría consecuencias secundarias por los medicamentos puesto que tengo un organismo altamente sensible.

Sufrí de trastornos alimenticios durante 17 años y lo único que sanó realmente mi sistema digestivo y la relación conmigo misma fueron las medicinas complementarias/alternativas. Todas aquellas opciones y herramientas “holísticas, naturales, energéticas” inconcebibles para el nicho del cual yo provenía y tan eficientes en la interacción con mi cuerpo altamente sensible que también impactaron positivamente la recuperación total de todos mis cuerpos (físico y energéticos).

Como actriz trabajando con emociones y contactando directamente con esta “materia prima “ que todos poseemos naturalmente como humanos, entendí cuán vinculados estaban nuestro ”sentir” con el bienestar general de nuestro cuerpo físico y campo energético.

Si en escena, como actriz, lograba crear emociones con suficiente intensidad como para afectar mi cuerpo físico al nivel de llorar, sudar o aumentar mi ritmo cardíaco, entonces la generación y gestión de mis emociones reales tenía que afectar también mi cuerpo y campo energético de alguna manera.

Este descubrimiento me hizo contactar profundamente con el ser altamente sensible que siempre fuí pues más adelante restauré mis dones como Niña cristal y al asumir y dejar de rechazar mi sensibilidad, sumado a la aceptación de mi habilidad como empata (facilidad para sentir los padecimientos físicos y emocionales de otros) pude contactar con varios de los dones que vine a ejercer al mundo, a través de mi espacio de sanación.

Estas habilidades, entrenadas, gestionadas, sumadas a mi historia de vida y complementadas con las herramientas que adquirí con los años, es lo que hoy dia me permite ejercer servicio como canal de sanación de energía universal divina ejerciendo como Reikista, Terapeuta olfativa, Cristaloterapeuta, Canalizadora de Registro Akáshico, Biodescodificadora Biológica entre otros.

En todas mis terapias de sanación me apoyan hermosos seres como lo son los aceites esenciales, las esencias florales y los cristales, usados en mi espacio de consulta. Recientemente he podido canalizar Arcángeles para mi vida personal pero aún no está disponible este servicio para consultas al público.

Mi pretensión a través de mis terapias energéticas es despertar humanos al potencial y poder auto sanador ilimitado que habita en su interior, creando conciencia sobre los sistemas de pensamiento y el ritmo de vida actual sumado a los sistemas de creencias o crianza que nos coartan, limitan y aprisionan desconectándonos de nuestro verdadero poder personal haciendo que nuestro potencial auto sanador se congele “hibernando” dentro de cada uno de nosotros esperando simplemente ser despertado, sacudido o reflejado por alguien en el exterior que no haga más que confrontarte para que reconectes con esa capacidad ilimitada y logres darte a ti mismo lo que siempre has buscado en el afuera.