Uno tiene que perseguir sus sueños y como si hace falta irse al otro lado del mundo. Esta es la historia de Pablo García, un entrenador de baloncesto malagueño -criado en El Palo y en el Unicaja– que acaba de cumplir su primera temporada al frente de un equipo profesional. En este caso, desde México con el Abejas de León, con el que ha firmado el mejor curso en la historia del club coqueteando con la final de la Conferencia Oeste en el campeonato nacional. «Fui a donde pude abrirme la primera puerta», declaró en los micrófonos de Radio MARCA Málaga.


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