Leo P. Martínez siempre ha sido un soñador y un luchador. A este joven de Coín con cinco años le detectaron un tumor cerebral que le oprimía el nervio óptico que le hizo perder la casi totalidad de la visión de su ojo derecho, solo tiene un 3%. En ojo izquierdo ha ido perdiendo visión hasta tener actualmente tan solo un 28%. Peso a esto su ilusión y pasión por el ciclismo no decae.