Padre, te gracias por la oportunidad que hoy me regalas para amarte, seguirte y adorarte en la santa eucaristía.

Te doy gracias, porque descubro que eres bueno con todos, no me apartas de tu lado, sino que me tratas con misericordia.

Te alabo, Dios del cielo y de la tierra, por todo lo bueno que haces en mi vida; estoy seguro que intervienes en mi historia con poder y me conduces de tu mano.

No quiero justificarme ni culpar a los otros de mis equivocaciones, necesito asumir la responsabilidad de mis decisiones, para cambiar todas las actitudes que no me dejan ser feliz. Lléname de tu presencia para conducirme con sabiduría.

Que la Santísima Virgen María bendiga mi hogar para que en esta navidad no falte nada y me una más a mí familia..

Amén