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Cuando nuestras metas o sueños parecen inalcanzables acostumbramos abandonarlos dejándolos dentro del olvido y tratando de continuar, pero esa carga se vuelve pesada, por eso hoy debemos retomar aquello por lo que habíamos dejado de luchar


La base bíblica es:


‭‭2 Samuel‬ ‭9:5‭-‬11‬ ‭NTV‬‬


Su nombre era Mefiboset; era hijo de Jonatán y nieto de Saúl. Cuando se presentó ante David, se postró hasta el suelo con profundo respeto. David dijo: —¡Saludos, Mefiboset! Mefiboset respondió: —Yo soy su siervo. —¡No tengas miedo! —le dijo David—, mi intención es mostrarte mi bondad por lo que le prometí a tu padre, Jonatán. Te daré todas las propiedades que pertenecían a tu abuelo Saúl, y comerás aquí conmigo, a la mesa del rey. Mefiboset se inclinó respetuosamente y exclamó: —¿Quién es su siervo para que le muestre tal bondad a un perro muerto como yo? Entonces el rey llamó a Siba, el siervo de Saúl, y dijo: —Le he dado al nieto de tu amo todo lo que pertenecía a Saúl y a su familia. Tú, tus hijos y tus siervos cultivarán la tierra para él, para que produzca alimento para la casa de tu amo. Pero Mefiboset, el nieto de tu amo, comerá aquí, a mi mesa. (Siba tenía quince hijos y veinte siervos). Siba respondió: —Sí, mi señor el rey, yo soy su siervo y haré todo lo que me ha ordenado. A partir de ese momento, Mefiboset comió a la mesa de David, como si fuera uno de los hijos del rey.


https://bible.com/bible/127/2sa.9.5.NTV

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