Entonces, aunque los legisladores se supone que no tienen ya vehículos oficiales para sus labores en el Capitolio, se da a conocer de que muchos de ellos pudieron abastecer sus vehículos privados con gasolina pagada por el pueblo a través de una autorización que dio el gobernador para eso con la Administración de Servicios Generales. Nada, que los políticos electos viven la crisis de hoy con las comodidades del ayer. ¡Pagado por el pueblo! Recuerda visitar www.walohd.com para que te subscribas al podcast, y para que dejes tus comentarios en mis redes sociales.