Cuando Dios vio la creciente ruina causada por el pecado, estaba profundamente afligido y aun deploraba haber creado a la humanidad Algunas y traducciones dicen que El se arrepintió de haber creado al hombre.  No debemos pensar en el arrepentimiento de Dios como un cambio de idea sobre su obra pasada.  Más bien, es una expresión de su profunda tristeza y una indicación de que El estaba listo para comenzar un nuevo curso de acción. “Dios no es hombre... para que se arrepienta” (Números 23:19).