Lo que nació como un Centro Terapéutico para tratar la adicción de alcohol y drogas pronto se convirtió en una lucrativa cadena de establecimientos informales sin supervisión de la autoridad sanitaria. Abusos, tortura y delitos sexuales se habrían cometido dentro de Centros Terapéuticos pertenecientes a la Fundación Creeré Chile. Más detalles en el siguiente reportaje.