Gracias a los buenos oficios y sobrada inspiración por parte de mi gran amigo, el Dr. David Silverstein, comparto con Uds. un breve estudio sobre el tarareo, forma de expresión antigua y muy original que todos hemos usado cuando las palabras escritas no son suficientes para expresar lo que llevamos en nuestra cabeza, y es aquí cuando el tarareo se impone como forma por demás original que sustituye el fraseo convencional.