En el año 1977 la banda inglesa Genesis dio dos conciertos en la ciudad de Manchester, ciudad en la que vivía en ese momento, gracias a estudios de posgrado. El caso es que al regresar a casa luego de presenciar la presentación del disco Wind and Wuthering, me percate de que no tenía mis lentes, por lo tanto decidí ir al día siguiente, para intentar conseguir lo extraviado, en la oficina de objetos perdidos y encontrados. No conseguí mis lentes, pero esta pequeña historia culmina dando apoyo al dicho criollo: no hay mal que por bien no venga..................!