May Madrazo ha salido esta mañana a la calle a preguntar a los usuarios de Metro Bilbao cómo se comportan en el suburbano. También si han visto alguna vez conductas incívicas. Como nos ha explicado, muchos de los usuarios han visto cómo otros viajeros no han cumplido con algunas de las normas de educación que reclama el metro en su campaña 'Convivamos en el metro'. También les hemos preguntado por el famoso manspreading, es decir, el despatarramiento masculino.
Las normas son sencillas:

-Por seguridad, no entres ni salgas al oír el cierre de puertas.

-En los ascensores, las personas en sillas de ruedas tienen prioridad absoluta.

-Los asientos grises, solo para quienes los necesitan.

-Con auriculares, disfrutas y no molestas.

-La mochila, en el suelo. Así, ni molestas ni obstaculizas.

-La persona portadora de coche de bebé, las personas mayores y otros colectivos con movilidad reducida (personas con muletas, mujeres embarazadas…) tienen prioridad respecto a otras personas y accederán según orden de llegada, después de las sillas de ruedas.
'Manspreading'
Según Wikipedia, el despatarramiento o despatarre masculino, en inglés manspreading es un término que se refiere a la práctica de algunos hombres de sentarse con las piernas abiertas. Especialmente en el transporte público, ocupando con ello el espacio de más de un asiento. Tanto la práctica como el uso del término han sido objeto de gran crítica y debate en internet. El término se popularizó en una campaña feminista contra el manspreading dentro de un blog de Tumbl.  En él, se publican cuadros de esta actitud psicomotora. En agosto de 2015, fue recogido por el diccionario Oxford English Dictionary.