Crisis de suministros: "Es buen momento para reflexionar sobre por qué ha sido tan barato importar de Asia"

Esta mañana hemos hablado unos minutos con Cristian Castillo, profesor de de los estudios de economía y empresa de la UOC. Con la ayuda de la Universitat Oberta de Catalunya hemos intentado comprender la escasez de suministros en Europa.

Según Castillo, "desde el fin de los confinamientos masivos, estamos viviendo una de las mayores crisis de desabastecimiento global que afecta a multitud de sectores. Son sectores muy dispares entre ellos, pero con puntos en común sobre el origen de las causas que la han provocado: pandemia, deslocalización productiva y estrategia geopolítica china."
Aumentan los plazos de entrega
En el blog de la entidad universitaria, Castillo explica que como consecuencia a esta falta de stock de materia prima nos encontramos con un incremento de los plazos de entrega importantes. Además, también de los precios de compra, que han llegado a triplicarse.

Por ejemplo, una materia prima como el caucho RSS33 ha visto en tan solo un año incrementado su precio de compra en un 61,03%. Ha pasado de valer 1,36$/Kg en el año 2020 a 2,19$/Kg en 2021. Son unos incrementos en los costes de compra que, "si en un inicio asumieron las empresas en contra de sus márgenes (en el mejor de los casos), ahora empiezan a repercutirse en el precio final de venta y, en consecuencia, en el bolsillo del consumidor."
Momento para la reflexión
A juicio de Cristian Castillo, esta situación puede suponer una oportunidad para la reflexión acerca de las importaciones. Durante muchos años hemos importando a países asiáticos con gastos de mano de obra muy barata. Esto ha provocado que los precios hayan bajado mucho, pero no sin consecuencias. La realidad es que se ha generado una dependencia de esos países muy importante. Ha salido tan barato comprarles que incluso ha seguido compensando pagar los gastos de transporte. Ahora cuando falla esos suministros, falla todo el sistema.
Invertir en semiconductores
Un ejemplo muy claro ha sido el del sector de automoción, electrodomésticos y los semiconductores. Para el experto, sería recomendable invertir en Europa en este tipo de materiales, para no poner en jaque estos sectores productivos cuando falle este tipo de material.