Dedicado y empeñoso apóstol del espectáculo audiovisual en el siglo XXI, el británico Christopher Nolan está bastante más cerca de Hitchcock que de alguien como Kubrick. De Sir Alfred, hereda cierta modularidad en sus argumentos y el gusto por trabajar con arquetipos, pero sobre todo la sensación de opresión física y mental que aqueja a Cobb en Inception (2010) y a el Protagonista, en Tenet (2020). Separadas por una década, ambas funcionan como eficaces meta reflexiones acerca del cine y sus géneros narrativos, el cine y la industria y el entretenimiento masivo como vía de escape y destino de diversas angustias contemporáneas. Internarse en los niveles del sueño, alterar la entropía (y, por tanto, la dirección del tiempo) de un objeto son conceptos muy atractivos a la hora de reinventar tus historias, pero no olvidar: también son metáforas de cárcel, escenarios donde no hay escape posible. De eso y más se habla en este podcast.