El Poder Judicial tiene un amplio desprestigio social porque la mayoría de la población no confía en él. Ante eso, el mundo de la política tiene que dar respuesta a esa demanda y ofrecer proyectos para cambiarlo. El mal funcionamiento del Poder Judicial tiene costos inmensos en la vida cotidiana de las personas. #AContramano, Editorial de Alfredo Zaiat.